Lo cierto es que, aunque en menor escala,
todas las ficciones hacen vivir a los lectores
“lo imposible”, sacándolos de su yo
particular, rompiendo los confines de su
condición, y haciéndolos compartir,
identificados con los personajes de la ilusión,
una vida más rica, más intensa, o más abyecta
y violenta, o simplemente diferente de
aquella en la que están confinados en
esa cárcel de alta seguridad que es la vida real.
Las ficciones existen por eso y para eso,
porque tenemos una sola vida y nuestros
deseos y fantasías nos exigen tener mil.
Porque el abismo entre lo que somos y lo
que quisiéramos ser debía ser llenado
de alguna manera,para eso nacieron las
ficciones: para que, de esa manera vicaria,
temporal, precaria y a la vez apasionada y
fascinante,como es la vida a la que ellas
nos trasladan ,incorporemos lo imposible
a lo posible, y nuestra existencia sea a la
vez realidad e irrealidad, historia y fábula,
vida concreta y aventura maravillosa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario